Si usted está preocupado por la posibilidad de que su hijo adolescente esté deprimido, consulte a un proveedor de atención médica. El proveedor le puede realizar un examen físico y solicitar pruebas de sangre para asegurarse de que no tenga un problema de salud física.
El proveedor debe hablar con su hijo sobre:
- Su tristeza, irritabilidad o pérdida de interés en las actividades normales
- Los signos de otros problemas de salud mental, como ansiedad, manía o esquizofrenia
- Riesgo de suicidio o de otro tipo de violencia (y si su hijo representa un peligro para sí mismo o para los demás)
El proveedor debe preguntar respecto al consumo de drogas o alcohol. Los adolescentes deprimidos corren el riesgo de:
- Beber en exceso
- Fumar marihuana (hierba) regularmente
- Consumir otras drogas
El proveedor puede hablar con otros familiares o los maestros del adolescente. Estas personas a menudo pueden ayudar a identificar los signos de la depresión en adolescentes.
- Regalándoles las pertenencias a los demás
- Despidiéndose de familiares y amigos
- Hablando acerca de la muerte o cometer suicidio
- Escribiendo acerca de la muerte o el suicidio
- Presentando un cambio de personalidad
- Corriendo riesgos importantes
- Aislándose y deseando estar solo
Llame de inmediato al proveedor o a una línea que atiende casos de suicidio si está preocupado por la posibilidad de que su hijo esté pensando en quitarse la vida. Nunca ignore una amenaza o intento de suicidio.
Llame a la línea 1-800-SUICIDE o al número 1-800-999-9999. Usted puede llamar las 24 horas del día/7 días a la semana en cualquier lugar en los Estados Unidos.